miércoles, noviembre 13, 2013

CARTA A TODA LA FAMILIA CABRINIANA


Fiesta de S. Francisca X. Cabrini


Queridas Hermanas y Familia Cabriniana:

¡Buena Fiesta!

“Si el Corazón Santísimo de Jesús me concediera los medios para construir un barco, fundaría entonces sobre el mar la “casa Cristóforo” (portadora de Cristo) y recorrería todos los mares con una comunidad, grande o pequeña, para ir a llevar el nombre de Cristo Jesús a todos los pueblos que aún no lo conocen o lo han olvidado.” (… entre una y otra ola, pág. 25).
Con este espíritu misionero les hago llegar a cada uno y cada una los saludos con ocasión de la Fiesta de Santa Francisca Cabrini. Ella que para dar a conocer el amor y la misericordia del Corazón de Jesús, recibió de Dios, la divina inspiración de fundar un Instituto misionero “ad gentes” haciéndonos comprender que toda nuestra vida, debe estar orientada hacia en esa dirección, y creo que esta debe ser la esencia de nuestra misión cabriniana.
Como consagradas y como Familia Cabriniana, debemos ser constantes en ver y conocer el mundo para acoger la realidad y las necesidades que viven los pueblos. Hoy tenemos necesidad no solamente de un barco sino de tantos medios que nos permitan llegar con mayor rapidez, allá donde Jesús se encuentra mutilado en la persona del pobre, nuestro hermano y hermana.
La época en la que vivimos es semejante a aquella vivida por Madre Cabrini, diariamente oímos los efectos de las guerras, de la violencia y con ello, la “movilización humana”, los pobres y los emigrantes que se ven obligados a dejar su patria en busca de VIDA, y muchos de ellos solamente encuentran la muerte. (Ejemplo en Lampedusa, Italia).
El Papa Francisco nos llama a la “solidaridad” y creo que para nosotros sea este “el momento favorable” en el que como dice el Santo Padre, podemos servir, acompañar y defender al pobre, al hermano que tiene tantas necesidades.
Las frases: servir, acompañar y defender son un programa de vida para los jesuitas y sus colaboradores y lo puede ser también para nosotros y nosotras en los distintos contextos donde vivimos y trabajamos.
El Papa Francisco dirigiéndose a todos las y los religiosos: “Si tienen una casa vacía, esta es para la carne de Cristo”, refiriéndose a los refugiados. Nosotros Misioneras y misioneros tenemos un gran compromiso en relación a los migrantes. La caridad de Cristo por nuestros hermanos migrantes, es un grito que llega hasta los confines del mundo. No estoy segura de poder decir como Madre Cabrini que “el mundo es demasiado pequeño”, me surge la pregunta: ¿Qué podemos ofrecer, hacer
para ayudar a este pequeño mundo? Con una atenta mirada sobre el mundo podremos conocer con claridad las necesidades y percibir “los señales que en este tiempo nos muestra el Espíritu de Dios.”
Querida Familia Cabriniana, si cada uno de nosotros pudiera hacer algo por aliviar el dolor de nuestros hermanos y hermanas, entonces podríamos repetir con Madre Cabrini: “Todo lo puedo en El que me da fuerzas.”
Hermanas y amigos, estamos viviendo un momento de gracia particular para nuestro Instituto, su vida y misión. Que María Santísima de las Gracias y Madre Cabrini nos acompañen y nos ayuden a responder a los deseos del Corazón de Jesús, para que podamos verdaderamente “hacer de Cristo el corazón del mundo.”
Les deseo a todos una buena fiesta y asambleas capitulares en optima preparación para el Capitulo General 2014.

Con afecto siempre,



Hna. Maria Aparecida Corrêa de Castro,msc